¿Buscando la Felicidad? El Desafío de Estar Solo
Aunque todos buscamos la felicidad, a veces no nos detenemos a pensar que quizás no somos completamente felices debido a las acciones que nos hacen centrarnos únicamente en vivir nuestra vida; como por ejemplo esa tendencia de “dejamos que las cosas fluyan”; una moda que más que brindarnos una oportunidad de entender que queremos en una relación de pareja, nos trae una profunda sensación de vacío, soledad y un fastidio de volver a empezar .
Hoy recordaba a alguien que me ilusionó el año pasado, pero más que la mala experiencia, recordaba que esa persona ya traía consigo un profundo dolor por un muy antiguo amor que terminó fatalmente. Se dice que las personas heridas lastiman a otras, y me pregunto si él es consciente de que al negarse a volver a sentir, solo hace que se sienta aun más solo y que añore aún mas el volver a ser amado de esa forma, limitándose por completo a conocer otras formas de amor
Recuerdo que cuando esa persona habla de otras áreas de su vida, estas también están insatisfechas, al igual que la emocional. Aunque tiene un buen trabajo, no es donde quiere estar, y aunque le gustaría viajar, gasta su dinero en salidas con amigos en lugar de ahorrar. En resumen, es alguien que quiere muchas cosas pero tiene miedo de vivirlas. Y ese miedo es recurrente en nuestra generación: queremos cosas, envidiamos a quienes las tienen, pero tememos un profundo miedo de hacerlo solos.
Me pregunto si en algún momento él será consciente de que todas esa carga, la cual es es el resultado de varias relaciones fallidas, demasiadas citas casuales, darle tanta importancia a las salidas con amigos y desear algo diferente pero esperar que eso llegue en lugar de trabajar por ello; son lo que lo hacen infeliz y le impide alcanzar ese “nirvana” que anhela.
Creo que la primera medicina para sanar lo que sea que haya sucedido en el pasado es estar solos, invitarnos a salir, hacer planes en solitario, conversar con nosotros mismos y conocernos de nuevo, con la misma intensidad que deseamos conocer a alguien que nos gusta. Al final, la relación con nosotros mismos es la verdadera esencia de “hasta que la muerte nos separe”.